The Cat Piano, dirigido por Eddie White y Ari Gibson, es narrado en forma de peoma a tráves de su personaje principal. La historia es oscura e intrigante, algo que se agradece por descolgarse de temáticas más familiares y blancas como el corto de Pixar, sin duda The Cat Piano irrumpe con su candidatura mostrando una osada historia que esta marcada en cierto punto por una carga de violencia que puede jugarle en contra. Representa un mundo bohemio habitado por gatos que se ve irrumpido or una sobra que comienza a raptar gatos para lograr una demente sinfonía con aullidos de gatos siendo torturados. The Cat Piano cuenta con una fotografía centrada en los tonos oscuros y azules que le dan el toque a la historia y a modo que irrumpen otros colores como el rojo nos acercamos a un climax donde el rojo representa la hostilidad de un humano perturbado y demente que disfruta con un gigantesco piano torturador de gatos. De alguna manera en esta historia el amor que desencadena el accionar del protagonista se ve opacado por la sórdida melodía del piano de gatos que da origen a la trama, algo para mí interesante y arriesgado que probablemente jugara a su favor.
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